“Un día mi abuelo me dijo que hay dos tipos de personas: las que trabajan, y las que buscan el mérito. Me dijo que tratara de estar en el primer grupo: hay menos competencia ahí” (Indira Gandhi) Le preguntamos a tu padre, cuando aún estabas en el vientre de tu madre, como te llamarían. Y nos dijo que tu nombre empezaría por J. A tu madre le gustaba Juan, pero al parecer tu padre había oído decir qué si al hijo se le pone el nombre del padre tendrá menos personalidad. No te lo creas. Conozco a hijos que llevan el nombre del padre y tienen mucha personalidad. Luego supimos que las dudas de la J eran entre Jaime y Joaquín. Joaquín es el nombre de tus dos abuelos, y también era el de tu bisabuelo paterno, ya fallecido. Si lo hubieras conocido, seguro que te gustaría llevar su nombre, pero ya aprenderás pronto que las mujeres mandan mucho, y a tu madre, aunque su padre, tu abuelo materno, también se llama Joaquín como yo, le gustaba más Jaime y así te llamare