Bronquitis aguda (y 2)
Ayer me preguntaba mi querida auxiliar de
enfermería del hospital que tomaba yo cuando padecía bronquitis aguda. Le respondí
que no tomaba nada. Y es verdad. Al menos desde hace mucho.
He tenido muchísimas bronquitis, más desde
los 11 a los 28 años, 17 años que estuve enganchado a los cigarrillos. Después
de los 28 muchas menos bronquitis agudas, contagiadas casi siempre por la
atención a los enfermos y por mis familiares.
Si le parece, querida amiga, sigo
hablándole de esta enfermedad infecciosa de los bronquios que muchos pacientes mayores
consideran como una enfermedad grave, tal vez por una información médica
inadecuada. La bronquitis aguda tiene unos síntomas muy molestos, sobre todo la
tos, pero la evolución es favorable, aunque lenta, sin necesidad de
medicación.
La bronquitis aguda suele comenzar con
molestias en la garganta muy desagradables, picazón y dolor leve, también al
tragar la saliva. Otras veces, con catarro nasal que luego “baja” a los
bronquios como refieren los pacientes. Las dos formas de comienzo están siempre
causadas por virus, pero pueden causarla diferentes virus.
Puede haber décimas de fiebre al inicio ―no
suele haber fiebre elevada―, malestar general y cansancio, pero ni la fiebre ni
los síntomas generales son tan molestos como los de la gripe, también causada
por un virus, el virus influenza.
Cualquiera que sea el comienzo, siempre
aparece uno o dos días después, o el mismo día, la tos, molestísima, por el día
y por la noche, impidiendo dormir como antes; al principio seca, sin
expectoración, que dura y dura... Un “coñazo” como dirían los jóvenes de ahora.
Luego se acompaña de expectoración (flemas) que es más frecuente y abundante en
los fumadores.
Para la tos, antes se prescribía codeína,
un opiáceo que no mejora la inflamación bronquial; solo produce sedación. Está
contraindicada en los niños y mayores de 70 años por los efectos adversos y no
debe prescribirse nunca cuando la tos pasa a ser productiva porque la tos es el
mejor expectorante. También se prescribían y aún se prescriben antihistamínicos
que pueden disminuir la tos por causar somnolencia. Incluso algunos
antihistamínicos, como la difenhidramina, se emplean como hipnóticos.
Por eso yo, después de tomar hace mucho en
alguna ocasión difenhidramina, dejé utilizarla porque el despertar por la
mañana no era agradable. Los primeros días, con la tos seca, suelo ir por la
noche a toser a un sofá hasta quedar dormido. Después, sigue la tos con flemas,
mucosidad que se produce en las glándulas submucosas de los bronquios por infección
o inflamación ―por eso los fumadores que tienen los bronquios inflamados
expectoran con mayor facilidad―. Solo con movilizarse algo el moco dentro de
los bronquios del paciente al estar acostado se produce tos.
A mi y a todos los pacientes nos parece que
la tos, tan molesta, dura una eternidad. Puede durar semanas. Primero se va
yendo la de la noche y luego la del día, y aún suele quedar, después de semanas
con tos, carraspeo, sobre todo al levantarse por las mañanas.
También les resulta desagradable a los que
están al lado. A Calígula, un emperador romano que se dice que nombró embajador
a su caballo, le molestaba la tos de su sobrino, un hijo de su hermana, y según
la leyenda tomó una decisión drástica y su sobrino no volvió a toser.
Es frecuente que consulten pacientes por
persistencia de la tos después de haber tomado durante días, incluso semanas,
diversos medicamentos: mucolíticos, antihistamínicos, antibióticos, broncodilatadores
y corticoides inhalados e incluso corticoides orales. Algunos refieren ligera
mejoría de la tos y creen que se debió a los medicamentos que han tomado y la
mejoría de los síntomas se debió al paso del tiempo. Nunca se ha demostrado
científicamente que los mucolíticos o beber mucha agua favorezcan la
expectoración. El mejor expectorante es la tos.
Por esto, mi querida amiga, tenga
paciencia. La complicación posible, pero no muy frecuente, del resfriado común
es la sinusitis aguda bacteriana. Digo bacteriana, porque el resfriado común
suele acompañarse de sinusitis por el mismo virus causante del resfriado y a
veces se complica con sinusitis bacteriana, y es cuando hay que tratarla con
antibióticos. La bronquitis aguda, aún más infrecuentemente, puede complicarse
con infección pulmonar (neumonía), pero no suele suceder en personas
previamente sanas.
¡Paciencia, querida amiga! La tos no puede ocultarse, pero la tos de la bronquitis aguda acaba, más tarde o más temprano, despareciendo sin tratamiento.
clinicajoaquinlamela.com
doctorjoaquinlamela.es
topdoctors.es/doctor/joaquin-lamela-lopez
joaquinlamela.blogspot.com
Comentarios
Publicar un comentario